Esfera de las Realidades: El Demonio de la Desesperanza
La noche poblada de estrellas era un perfecto manto de inspiración para los melancólicos. Abajo, cada uno de los mortales se dirigia a sus destinos. Ya fuera en vehiculo o a pie, lo que tenian en común era el estar todos inmersos en sus propios pensamientos. Algunos conversando sobre sus penas con alguien, y otros hablándole al unico ser en el que podian confiar: a si mismos.
Rara vez aparece alguien que lo nota, pero los pensamientos, oraciones, lamentos, y demás, se elevan como un vapor invisible hacia la estratósfera. Se convierten en murmullos que sólo oídos no humanos pueden escuchar. A lo mucho, lo que la gente llega a sentir es una cierta "pesadez". Es en esas ocasiones cuando manifiestan que el día se está sintiendo diferente, cuando dicen que algo en el aire se siente apabullante. Y hasta ahí llega su alcance, pues así dispuso el que todo lo regula y vigila. Que sus efímeras creaciones en la Tierra tuvieran esa venda sobre los ojos, junto con muchas otras.
Pero no pasa lo mismo con quienes no son humanos. Y por lo tanto, no sucedía así con Goel de Ragnarok, el engendro del infierno del grupo llamado Los No-Amados, quien de humano tenía solo la apariencia. En ese momento, vigilaba la ciudad posado como un halcón sobre un anuncio panorámico. Veía el tráfico abajo. Cuando era niño, le encantaba ver las luces de los coches. Le recordaba cómo lo cautivaban de niño. Árboles de Navidad, linternas, fuegos pirotécnicos. La luz le hacía sentir vivo.
Eso era entonces.
Se dejó caer hacia el tráfico en caída libre. Luego, solo un ligero esfuerzo, y se elevó por los aires. Voló por sobre el centro de la ciudad. Pasó por sobre hoteles, oficinas, la plaza...
Y entonces se elevó más. Lo suficiente para llegar a ver diminuta la ciudad. Era lo genial de esos dones de los que gozaba, por los cuales daba gracias continuamente de no ser humano, y de poder realizar cosas que otros solo sueñan. El volar por cuenta propia era una de ellas. Desafiar al manto celeste mismo, como quisiera, cuando quisiera. Así se quedó, sintiendo el viento en el rostro, cuando de pronto todo a su alrededor pareció empezar a desmoronarse. O quizá desmoronarse no era la palabra correcta. Más bien, a despintarse. En segundos la ciudad entera, el cielo, todo lo que sus ojos alcanzaran a ver pareció desaparecer y dejar en cambio un blanco brillante cegador.
Goel acababa de ser llevado a uno de los niveles del Infierno. ¿El número? Eso era lo de menos. Era La Nada. Todo era ese blanco, ese maldito blanco, y él suspendido en el aire como estaba. Excepto que ahí no habia suelo a donde bajar. Ni siquiera un Arriba o un Abajo. Sólo ese vacío blanco que volvería loco a cualquiera, no sabiendo hacia dónde está mirando, y preguntándose si tiene sentido el solo intentarlo, considerando que no hay dirección, ni materia, ni perspectiva.
Ese nivel está basado en un concepto de la mente humana que muchos conocen bien: el famoso "Pon tu mente en blanco". La primera reacción de Goel fue gritar con ira, demandando que el responsable de llevarlo ahí se mostrara. Incluso su voz parecía apagarse, por lo que repitió las mismas palabras una y otra vez. Ninguno de sus encuentros con Fobos le ocasionó tanta ira como la que se notaba en sus palabras. ¿Pero por qué se acordaba de él? No tenía caso. Fobos, para fines prácticos, ya estaba acabado.
Viendo que no tendría objeto seguir hablando, optó por guardar silencio. Un murmullo, vibrando en sus oídos, se dejó escuchar. Eso es lo que sienten los prisioneros en aislamiento. Lo mismo que siente un catatónico en su miseria.
Y en esa soledad su mente se volvió consciente de la Esfera de las Realidades. Como el tiempo no es constante en ese nivel, en segundos asimiló lo que quizás al más sabio en la Tierra le tomaría una vida, o tal vez más. Supo de las variantes de la existencia que los científicos vislumbran. Y pudo verlos, también... a Abstracto y Concreto en sus puestos. Y mientras esta información llegaba en oleadas a su mente...
- ¿Goel?
Quién sabe de donde había venido una voz. Tal vez ni siquiera fue real, como esas veces en que nuestra mente nos juega un truco y nos hace creer que alguien ha dicho nuestro nombre, cuando en realidad nadie ha hablado mas que un carajo.
- ¿Goel?
De nuevo. El héroe de los No-Amados se decidió a responder en esta ocasión, con la pregunta más absurda que se le puede hacer a alguien que se esfuerza en ocultarse:
- ¿Dónde estás?
Se escuchó el perturbador llanto de varios infantes. Creciente, hasta un punto en que le heló la piel y algo recorrió su espalda. Y, como si el sonido mismo se convirtiera en materia, un vapor verdoso comenzó a aparecer, danzando al compás de los llantos, y así es como se materializó alguien con figura de hombre. Alto, de tez blanca. Era notorio que se le consideraría apuesto. De cabello oscuro y largo, y un elegante traje igualmente oscuro. Sus pupilas tenían un verde brillante idéntico al vapor del que acababa de surgir.
- Hace ya tiempo que no te teníamos por aquí, héroe - dijo.
- Eres tú... - contestó Goel, clavándole una mirada fría - No te ves como siempre, pero ya te reconocí.
- ¡Mira! Que me recuerde alguien así. Qué halago. Pero en serio, halagador de verdad. Si fuera mujer estaría mojándome.
Tenebrios, el demonio de la desesperanza. Hermano de Fobos. Ciertamente no era su aspecto usual. Aunque la apariencia era lo de menos ahí donde estaban.
Suspendidos en el aire, se miraron fijamente unos segundos. Dos seres de la misma naturaleza, pero de ideas distintas. Uno apasionado por ideales que muchos consideran perdidos, y otro, apasionado por el mal mismo. Un auténtico defensor del pensamiento de que el actuar mal por el Mal mismo, es actuar con verdadera fuerza. Y en la fuerza, está el convertirse en un dios.
- No quiero hablar contigo, Tenebrios. No me interesa nada de lo que tengas que decir. Tú y tu hermano son la misma mierda. Son lo que hace que el mundo esté como está, y que la gente se atropelle y joda, unos a otros, y cada dia se vea con menos esperanza que el anterior.
- No todos piensan asi.
- Los que piensan diferente son los que no saben pensar. Los que se ciegan a la realidad.
- ¡Ah! Ja ja - rió burlonamente - ¿Eso crees tú, señor Goel, señor No-Amado? Tú hablas de pensar. ¿Qué sabes tu, pendejo de mente limitada? Si bien es cierto que esos que tu mencionas de verdad no saben pensar, los que son como tú no están tampoco muy bien...
Por fin desapareció ese entorno blanco sin Arriba ni Abajo. Con un pensamiento, el lord demonio los transportó fuera de ahí. Goel se contuvo de atacarlo, consciente de que es mejor saber lo más posible antes de hacer cualquier movimiento. Esa es una verdad incuestionable.
- ¿A dónde nos llevas? ¿Qué pasa? Se siente extraño...
Difuminado, confuso... REAL.
Un espacio verde, el apacible olor de un bosque, un riachuelo cercano, por el inconfundible sonido del agua corriendo. Los árboles se agitaban un poco por la acción del viento. Y sentados como estaban, los ojos del lord demonio mostraban ahora pequeñas llamas dentro de ellos. Una comunión de los elementos que, aún con el grotesco ultimo, inducia tranquilidad.
Acceso... denegado.
Acceso...denegado.
Ia! Ia!
Ia! Ia!
Acceso... exitoso.
Ubicación: Esfera de las Realidades.
TENEBRIOS: Habla.
GOEL: ¿Qué es esto?
TENEBRIOS: ¿Siempre tienes que estar haciendo preguntas? Es desesperante.
GOEL: Lo voy a convertir en exigencia, en vez de pregunta. Dime dónde estamos.
TENEBRIOS: Tú eres como los humanos. Te crees superior a ellos, y a fin de cuentas haces lo mismo. Enfocarte en lo que no es importante, y hacer preguntas estúpidas. Todos los humanos cometen esos dos errores en demasía.
GOEL: Yo no sé cuáles son las preguntas correctas. No me importa. Yo pido lo que quiero, pregunto lo que deseo saber en el momento.
TENEBRIOS: Qué simple. Para contestarte, estamos en un lugar relacionado a eso que acabas de averiguar hace unos momentos.
GOEL: La Esfera.
TENEBRIOS: Sí.
GOEL: ¿Dónde están ellos?
TENEBRIOS: No te serviria de nada ver a esos dos. O hablarles.
GOEL: Eso lo decido yo.
TENEBRIOS: Tú no puedes decidir. Lo que eres y lo que te pasa está dictado por alguien más.
GOEL: ¿Me vas a hablar de Dios? A eso me trajista aquí, vaya cosa.
TENEBRIOS: Nadie dijo que fuera Dios.
GOEL: Ah, si. Que torpe. Lucifer, entonces. Tu jefe. El Capo de tutti Capi de tu tierra.
TENEBRIOS: Tampoco.
GOEL: ....
TENEBRIOS: No esperabas eso.
GOEL: ....
TENEBRIOS: Si, estar aquí de pronto deja sin palabras. Yo lo supe, hace siglos, la primera vez que llegué aqui por casualidad.
GOEL: ....
TENEBRIOS: Por extraño que parezca, esta es una reunión diplomática. No para pelear, no para agredir. Es intercambio de información.
GOEL: ¿Qué información?
TENEBRIOS: ¿Nunca te has preguntado de dónde vienen los dictados que afectan tu vida, Goel?
GOEL: De verdad quieres tener esta conversación, por lo que veo.
TENEBRIOS: apremiantemente.
GOEL: Muy bien. Sí, me lo he preguntado. La mayoría atribuye su creación y el rumbo de su vida a un Ser Supremo. Llámesele Dios, o la manera que lo prefiera. La otra parte desesperadamente busca la celebración de su autonomía, negando la existencia de éste, y declarando al mundo físico actual en el que viven como lo único que hay.
TENEBRIOS: Pero esos son ellos.
GOEL: Pues, sí.
TENEBRIOS: te pregunté a ti.
GOEL: ...
TENEBRIOS: para ser un guerrero y un líder, no eres muy elocuente en tus respuestas.
GOEL: Lo que pasa es que tus preguntas desencadenan otras. La más obvia, el por qué quieres saber eso de mi. Y la más significativa: Abstracto y Concreto. Ellos. Quiero saber todo de ellos.
TENEBRIOS: qué necedad el querer saber de otras cosas, y de otros seres, antes que conocerte bien a ti mismo.
GOEL: sé lo suficiente.
TENEBRIOS: sabes lo que tus años y tus andares te han hecho creer que sabes.
GOEL: estás dándole vueltas a todo.
TENEBRIOS: dime quién eres. Defíneme en sí quién eres.
GOEL: yo soy Goel de Ragnarok, fundador del grupo de los No-Amados, uno de los exiliados del Infierno a la Tierra, a vivir como humano y sufrir lo que ellos. Soy el que ocasionó el golpe contra tu jefe, Lucifer, e hizo vacilar su trono. Soy el que se opone a la influencia de él, de Fobos, de ti, y todos tus desdichados hermanos, sobre los demás seres existentes. Vivo para asegurar que tu, tu Antipapa, tu jefe y cuanta basura ha atormentado a la gente por años deje de existir. Y así, el sufrimiento y la desdicha se sepan equilibrar para todos, y dejen de estar desproporcionados, como ha ocurrido por siempre a causa suya.
TENEBRIOS: muy explicativo.
GOEL: gracias.
TENEBRIOS: ¿Qué tal si te digo que existes en una de las realidades de entre billones, y eres el sueño y la invención de un escritor desdichado con mala experiencia en el amor, hastiado de la vida, que recientemente ha estado recreando escenarios en su mente relativos a morirse.
GOEL: mh.
TENEBRIOS: ¿no te sorprende?
GOEL: algo. Pero despues de todo, me acabo de volver consciente de los Dos de los que estaba hablando.
TENEBRIOS: cierto.
GOEL: sigueme diciendo.
TENEBRIOS: de aquí venia mi pregunta de si conocias tu origen.
GOEL: aja.
TENEBRIOS: tu escritor no es famoso, no es excepcional para los demás en su mundo. Te concibió como una forma de proyectar a ese Yo Ideal que vio en sus pensamientos desde sus dias en la primaria. Los altibajos en su vida, principalmente los amorosos, han sido lo que ha convertido tu vida en un revoltijo. Son lo que causó las bajas en tu grupo de No-Amados, el auge de tu compañera y posterior némesis Delirio y la desaparición de tu compañera Melora hace años, a la cual no volviste ni volverás a ver. Es la causa de tu depresión e incluso quien plasma su visión de amor y desdicha en tus orígenes y causa.
GOEL: vaya.
TENEBRIOS: a tu escritor lo estuvieron analizando Abstracto y Concreto, hace poco. Y la influencia de eso es lo que causó perturbaciones aquí, donde tú te mueves. Eso es lo que te pateó al nivel en el que estabas ahora, del que tuve que irte a sacar.
GOEL: qué amable. Gracias.
TENEBRIOS: por nada. A nosotros no nos gusta tenerte ahi, sin tener permitido torturarte.
GOEL: ni a mi, sin poderlos exterminar. Continúa.
TENEBRIOS: tu mundo está llegando a su fin. Porque el de él también. Negociaré contigo los términos para la rendición de los No-Amados ante el Infierno, y la salvación tuya, y de tu escritor.
GOEL: ... ¿perdón?
TENEBRIOS: lo que oiste.
GOEL: ja ja ja ja ja ja ja ja ja!
TENEBRIOS: no es una broma.
GOEL: para mi lo es. Los No-Amados somos una causa perdurable, y si estamos ya hablando de multiples realidades, en todas puede existir el ideal de la libertad e igualdad. Si en esta linea temporal o como quieras llamarle se extingue, en otro sitio seguirá. Se llamen o no así, en algun sitio siempre existirán unos No-Amados.
TENEBRIOS: eres tan idealista que podria llorar sangre.
GOEL: créelo.
TENEBRIOS: ¿Quieres saber más de tu escritor?
GOEL: adelante. Claro. A cualquiera que le digan que es creado por un escritor que aqui es una fuerza creadora omnipotente, y en otro lado es comun y corriente, le picaria la curiosidad.
TENEBRIOS: tu escritor es un tipo que se hace llamar Alexander. A ti y a sus otros personajes incluso les tiene afecto. Le pesa el no saber ya cómo darte a ti y a los otros una vida feliz en tu mundo. Porque no la tiene. Nadie puede dar lo que no tiene dentro de alguna forma.
GOEL: aja.
TENEBRIOS: no tiene nada de especial. Yo creo que Abs. y Con. lo escogieron por aburrimiento, para estudiarlo. Un completo azar. Imaginar que el tuviera algo de importante es ridiculo. No tiene ningun puesto notable, ni obras hechas. Tiene algunos roces menores referentes a daño a otros... por ahi alguna que otra aventura de genuina maldad.
GOEL: aaah... ahora entiendo.
TENEBRIOS: ¿Que cosa?
GOEL: Era uno de los suyos. Uno más de los gatos sirvientes de ustedes. Con razón el interés.
TENEBRIOS: lo era, pero no creas que por ello es el interés. Nuestra intención es facilitarle perdurabilidad a tu grupo, y por consiguiente, a él también.
GOEL: él incluído.
TENEBRIOS: recuerdas esas veces que has estado triste, y de pronto sentiste de la nada que alguien te miraba y consolaba, lo recuerdas seguramente...
GOEL: si.
TENEBRIOS: cuando llegaste a estar solo, y de pronto volvia a ti la gente que se habia ido, y te daban su cariño y su confianza, haciendote sentir cobijado en esa seguridad tan esplendida, como si alguien los hubiera tomado y movido como piezas de ajedrez, llevandolos a ti... ¿también?
GOEL: lo recuerdo también.
TENEBRIOS: Y esas veces en que la vida ya parecia aburrida y monótona, y como si alguien te las mandara, llegaban aventuras y vivencias extraordinarias, que cuando te ponias a analizar como es que se dieron, no les hallabas explicación.
GOEL: si.
TENEBRIOS: ahi lo tienes. La obra de tu "padre", el escritor.
GOEL: oh, dioses...
TENEBRIOS: asi es.
GOEL: y el bienestar de la gente a mi alrededor, las cosas buenas que les han pasado y cuando sus angustias se han solucionado...
TENEBRIOS: fue el, tambien. Tu Alexander.
GOEL: ¿Eso esta en riesgo de desaparecer?
TENEBRIOS: Si.
GOEL: ¿Por que?
TENEBRIOS: porque tu escritor ha traido cosas a cuestas desde hace algunos años, que siempre manejó de la forma que pudo. Andaba siempre en el vaivén causado por fuerzas opuestas, deleites y sinsabores, y si bien se volcó en vicios y cosas nocivas en cierto momento, fue de forma moderada, al menos a mi parecer. Ahora que tocó fondo, encaró a sus miedos y los apartó, no por una convicción de estar mejor, sino porque ya no le importa. Y debido a eso piensa ahora en extinguirse.
GOEL: ¿Cual fue el catalizador?
TENEBRIOS: catalizador.
GOEL: si. El gatillo. El detonante.
TENEBRIOS: lo dices con una gran seguridad.
GOEL: siempre lo hay.
TENEBRIOS: en mi experiencia de siglos, sí, tienes razón. Te concedo eso, joven engendro.
GOEL: tu experiencia de siglos sobre los hombres se basa en que estos son odiosamente repetitivos en sus sentimientos y su proceder. Tanto que yo también puedo jugar al que todo lo sabe y todo lo deduce aquí. ¿Como se llama?
TENEBRIOS: ¿Como se llama quien?
GOEL: ¿Quien va a ser? La mujer. La mujer que tiene embriagado y abstraido emocionalmente al escritor.
TENEBRIOS: el aseguró que es amor sincero. Cuando nos asomamos a su alma, vimos que si lo es. Por eso no hemos podido jalarlo al lado del Infierno nuevamente.
GOEL: El nombre.
TENEBRIOS: ah si. Aunque no creo te ayude mucho saberlo. Como es ese nombre, puede ser cualquiera.
GOEL: Aun así.
TENEBRIOS: Te basta saber que es una mujer a quien encontró tierna. Ella se portó como su amiga, habló seguido con él por buen tiempo, hasta que decidió alejársele y rechazarlo.
GOEL: ya.
TENEBRIOS: Si quieres darle un nombre, llamémosla... Artemisa. Sí, es la referencia más obvia.
GOEL: Artemisa. Todo esto por una mujer.
TENEBRIOS: Si. Porque ya la mención de su nombre es mucha en su maraña de neurones. Artemisa, llámala.
GOEL: Ha de ser una influencia muy grande, para que el escritor esté así.
TENEBRIOS: ¿Quieres leerlo de él mismo?
GOEL: ¿Como?
TENEBRIOS: Si. Aquí lo tienes. Léelo de él mismo: "Ella es inteligente, artistica, y contempla el mundo de una forma sensible y optimista. cosas que me faltan a mi. en ello es donde esta el complemento, y en ello tambien esta el que me enamorara tanto como ahora. No senti algo tan fuerte nunca en mi. La quiero con la fuerza de mil soles, aun con esa negativa y desprecio de parte suya. Es mi Musa, y si me hace bien el solo quererla sin tenerla... el que ella llegara a realmente estar aqui, debe ser el equivalente a como Dante imagino el Paraiso. O los budistas el Nirvana."
GOEL: lo toma muy en serio, por lo que veo.
TENEBRIOS: eso parece.
GOEL: ¿Que hará?
TENEBRIOS: ahora estas siendo curioso. Tu no tienes el nivel ni el derecho de contemplar el futuro.
GOEL: dijiste que venias a negociar. Tu eres quien me trajo a la mesa, tu ofreces la "botana". Muéstrame lo que quiere hacer él. La imprudencia que va a hacer.
TENEBRIOS: te lo muestro en sus propias palabras, también.
GOEL: soy todo oidos. U ojos, para lo que sea.
TENEBRIOS: tu escritor dice: "lo que voy a empezar a hacer es (ilegible. inaudible.), tengo varios contactos, todo esta en acercarme. y ponerlo en una prueba extrema. mi existir y mi racionalidad, quiero decir. o comienzo a crear y hacer cosas por mi estando asi anestesiado de tanto dolor y carencia afectiva, o sucumbir. caer. quiza morir. Siendo la mas probable esa ultima.
GOEL: ¿Qué hace? No, no. ¡ESCUCHAME! ¡ESCUCHAME, ESCRITOR! ¡SI LOGRAS OIR MI VOZ, NO TE PRECIPITES AL ABISMO! ¡SI ME HICISTE UN GUERRERO QUE PERDURA ES PORQUE TU TIENES ALGO DE ESO! ¿¿Me puedes oir?? ¡Vas a decaer y a morirte! ¡Ya vi que sí estás queriendo darte fin, no lo hagas!
TENEBRIOS: Pierdes el tiempo.
GOEL: ¡Tu fin será el de muchos! ¡Sé que te parece todo perdido y que todo lo bueno se te está negando, pero no te debes ir! ¡Por el bien de muchos cercanos a ti y otros en este lado, no te debes ir!
TENEBRIOS: no te oye.
GOEL: ...
TENEBRIOS: en verdad que no.
GOEL: ....
TENEBRIOS: sus ultimos intentos de estabilizarse han sido un fracaso. Su caida es inevitable. Tu mundo se va a venir abajo. El ocaso de ese hombre es el de tu realidad también. Convenientemente, no la mia. Asi como tu decias que tus No-Amados existen en todo sitio, yo más bien digo, el INFIERNO es el que prevalece en todo sitio. Cosa que no pasa con tus seres queridos, a quienes has estimado y protegido. Y vaya que seria en vano si es que el cerebro de tu escritor se apaga.
GOEL: ¿Que procede?
TENEBRIOS: Estás listo para oir mi oferta.
GOEL: nunca nadie murió por solo oir.
TENEBRIOS: Te ayudaremos.
GOEL: qué generosos. Me pregunto dónde está el truco.
TENEBRIOS: te restauraremos a Melora en tu mundo, y el auge y presencia de los No-Amados sobre la Tierra. Y te ayudaremos a rescatar al Escritor.
GOEL: ¿de que forma?
TENEBRIOS: Le daremos a la mujer que tiene, y le daremos éxito y plenitud. La paz que toda su vida ha estado buscando. La paz y el amor.
GOEL: aja.
TENEBRIOS: y durante su vida, disfrutará esa felicidad. Se bañará en ella. Y ustedes, No-Amados, en la suya. De esa manera, ya se vuelve innecesario discutir la transición, puesto que tu mundo no acabaría.
GOEL: Me ofreces la suspensión de un cataclismo evidente, lo cual en otra realidad sería solamente el cumplimiento de los anhelos de un hombre.
TENEBRIOS: asi es.
GOEL: Contéstame esto: ¿Por que a el? Porque ahi en el sitio donde él esta, me imagino hay otros que la pasan mal. Incluso peor que él. Y aunque está mal medir la propia desdicha en relación con la ajena, no deja de aparecer la pregunta... ¿Por qué a unos si, y a otros no? Y de acaso ocurrir que se le cumpliera lo que quiere, qué gusto me daría. ¿Pero por qué no a mas de uno?
TENEBRIOS: eso esta fuera de discusión. El ofrecimiento es sobre el y tu.
GOEL: ustedes no son muy distintos a las corporaciones dominantes del mundo de los hombres. Los que sonrien y cantan aqui y alla los supuestos trabajos de beneficencia que hacen.
TENEBRIOS: con la diferencia de que nosotros admitimos que en realidad no nos importa. Esto es un negocio.
GOEL: ¿Que piden a cambio?
TENEBRIOS: como si no lo supieras.
GOEL: dilo.
TENEBRIOS: desde el principio, la base y el jugo primario de la existencia ha sido el alma. Lo que te hace pensar, sentir, y moverte. La cautivación filosófica de Sócrates, el concepto que Aristóteles quiso volver mortal y el buen tonto de Tomás de Aquino se empeñó en mostrar como inmortal.
GOEL: almas.
TENEBRIOS: ustedes. A ti te diriamos cómo influenciar y convencer al escritor de ello. Y seguramente no se opondría.
GOEL: todo se reduce a eso.
TENEBRIOS: eres necio y estupido si lo minimizas. No tienes idea del valor del alma para la existencia total. Para la Esfera misma. Todos los que trascienden lo saben.
GOEL: tu oferta es tentadora.
TENEBRIOS: y vaya que lo es. Por tu bien y el suyo. ¿Tu quieres su bienestar, no?
GOEL: si.
TENEBRIOS: y qué mejor que darle lo que quiere. Tan solo imagina, la dicha de los besos, los abrazos, y la compañia de esa mujer que uno idolatra, por la que se compondrían mil canciones si se fuera musico, mil poemas, o incluso edificarle mil monumentos...
GOEL: si.
TENEBRIOS: y tu, en tu gloria de heroe, convertido en un Aquiles, un Hercules, lo mejor entre lo mejor, el ejemplo mismo del guerrero que haria palidecer antiguas leyendas.
GOEL: quiero el bienestar del escritor, si.
TENEBRIOS: bien, entonces.
GOEL: pero no así.
TENEBRIOS: ¿te niegas? Eres más tonto de lo que pensé.
GOEL: Tal vez. Pero es lo que tengo por decir. El escritor puede elegir su camino, quizá se sentiria igualmente tentado. Pero por mi parte no contribuiré a ello.
TENEBRIOS: ¿Que no lo entiendes, pendejo pedazo de mierda? Ambos van a su fin. Directo.
GOEL: Eso ya lo sé, demonio idiota.
TENEBRIOS: ¡Acepta el trato, y déjate de chingaderas! O lo que le pase a él, y a los demás, cae sobre tu conciencia. La oferta está aquí. ¡Tómala, con un carajo!
GOEL: Los No-Amados no se venden.
TENEBRIOS: ah, estúpido, estúpido...
GOEL: Nosotros juramos que nunca, NUNCA, serviriamos en su reino. Y eso se mantiene. Y allá donde está, se que él juró lo mismo. Quizá flaqueará, quizá hay riesgo de que ceda, pero eso queda a su criterio. Como también el decidir su destino. Habiendo algo malo sobre eso ultimo, nosotros afrontaremos las repercusiones que haya acá, en este lado.
TENEBRIOS: Ustedes... jamás aprenden.
GOEL: No. USTEDES son los que no aprenden. La victoria del hombre que se define como un auténtico luchador no es el tener todas las cosas que quiere, sino el pelear por lo que quiere y es realmente importante, y defender lo que en verdad es valioso en su vida, con honor y valentia, probando que en efecto es dueño de su camino y de su ser.
Tenebrios decidió retirarse, y se desvaneció en un parpadeo. Goel quedó ahí, en ese hermoso espacio verde, que podia representar esa misma paz de la que el enemigo le habló. Esa paz que buscaban tanto él, como el tan mencionado escritor. Una paz que no era fácil de hallar, que tal vez estuviera en las pequeñas cosas de cada dia, o quizá en el beso y la piel de la persona amada, o tal vez en el reposo de la tumba. Esa última deseó no fuera la contemplación de aquel su Escritor, o al menos, no el destino cercano al que le guiara su camino. Se permitió un momento de meditación, y pedir por él, antes de incorporarse y salir volando por los aires, tan veloz y uniforme en su trayectoria, como queriendo escapar de sus propios pensamientos. Seguramente el escritor tendria a alguien cerca que ayudaría a mantenerlo en equilibrio. Rezó porque así lo fuera.
Ahhhh que harìamos sin esa imagen amada a la que perturbamos con nuestros pensamientos?
ResponderBorrarLa figura a la que amo y odio a la vez por no corresponderme, por no sentir lo mismo que yo, por no basar su existencia en mi.
Siempre lo he dicho, el mundo es una historia de amor.
Me gustò la parte que dice que nadie da lo que no tiene adentro es una valiente afirmacion la mayoria de la gente no esta bien y aun asi intenta "aconsejar" o "enseñar" como podemos estando tan jodidos tener el cinismo de sentirnos mejor que otro?
Por ultimo me gustò el guiño al "conocete a ti mismo" fundamental en cualquier pensamiento.
es un amor-odio
ResponderBorrarsin pegarle al psicologo
lo que necesitas son unas vacaciones. y no se.
el post esta muy bueno.me gusto mucho que metieras a Goel en esto.y el final tambien.
Tercis!!!!!
ResponderBorrar"GOEL: No. USTEDES son los que no aprenden. La victoria del hombre que se define como un auténtico luchador no es el tener todas las cosas que quiere, sino el pelear por lo que quiere y es realmente importante, y defender lo que en verdad es valioso en su vida, con honor y valentia, probando que en efecto es dueño de su camino y de su ser."
ResponderBorrarMuy bueno, es una evolucion del post de concreto vs. abstracto, se complejiza, ahora aparece el escritor, y este como creador de realidades.....mas bien lo veria como el medio por el que estas se presentan, los dialogos son fuertes, y denotan vida propia, no, aqui tenemos a alguien que, efectivamente, ha hablado con estos seres, y de alguna forma quiere dar manifiesto de todo ello, y que en sus palabras define como: "Goel quedó ahí, en ese hermoso espacio verde, que podia representar esa misma paz de la que el enemigo le habló. Esa paz que buscaban tanto él, como el tan mencionado escritor. Una paz que no era fácil de hallar, que tal vez estuviera en las pequeñas cosas de cada dia, o quizá en el beso y la piel de la persona amada, o tal vez en el reposo de la tumba. Esa última deseó no fuera la contemplación de aquel su Escritor, o al menos, no el destino cercano al que le guiara su camino. Se permitió un momento de meditación, y pedir por él, antes de incorporarse y salir volando por los aires, tan veloz y uniforme en su trayectoria, como queriendo escapar de sus propios pensamientos. Seguramente el escritor tendria a alguien cerca que ayudaría a mantenerlo en equilibrio. Rezó porque así lo fuera."
estas diciendo que te quieres suicidar? por la chica?
ResponderBorrarboom...
Coincido contigo spawny, hay que meditar mucho este post....
ResponderBorrarPor lo pronto, solo puedo decir que es un post bastante interesante, me encanto el hecho de incluir a Goel.
Espero que pronto postees la siguiente parte de esta historia.
Cuidate mucho, un abrazo :)
Como pieza literaria, creo que este texto es de lo que más calidad he leído en mi tiempo como lector de este blog. Bien logrado, complejo, con diálogos que pueden ser interpretados de vrias formas... Este tipo de talento es el que le falta a muchos guionistas hollywoodenses que explotan las películas apocalípticas sin ofrecer cosas nuevas.
ResponderBorrarY, tampoco por parecer psicólogo o hablar de cosas que no me incumben (¿Quién soy yo para hablar de alguien más, cuando aún no me conozco del todo?), pues coincido con lo de las vacaciones. O tal vez dedicar aún más tiempo al ejercer la escritura...
Eso sí, ¡Qué feo cuando el mundo lo construímos alrededor de alguien, y ese alguien lo destruye! Pero bueno, todo puede ser reconstruído, es sólo cuestión de tener paciencia y buscar la forma en mejorar lo antes hecho.
Alejandro, o Alexander:
ResponderBorrarMe da mucha pena ver que sigues terco a ser autodestructivo. Pesimista. En eso si te pareces a como eras en esos años que siempre extrañas.
Tú eres muy talentoso. Y listo. Pero de alguna forma siempre te las arreglas para acabar en un punto donde te haces daño a ti mismo. Me da pena que ésta niña no te quiera. También todo lo otro que te tocó vivir y que sí es muy feo pero a la vez no sé por qué te detiene. Todos tienen en su vida tristezas, traiciones, abusos de cuerpo y mente, y muchas cosas. Pero está en cada quien si se dejan caer o si lo toman para hacerse más fuertes.
Tú te estás dejando caer. El hecho de que tu Artemisa no te ame no es el fin del mundo. Las otras cosas que te han pasado en los años recientes tampoco son el fin del mundo. Es feo pero la vida sigue. Muchos que te conocemos te hemos estado esperando por años a verte que por fin despegues. Hasta ahorita sigues sin hacerlo. Deja de lado ese drama y haz las cosas que toda tu vida te has detenido de hacer y has dejado pendientes. Quién sabe y a lo mejor haciéndolas te empiecen a llegar las bendiciones que quisieras y que hasta ahora están detenidas. Yo espero que algún día llegues a estar bien. Pero ayúdate a ti mismo a estarlo.
Podria escribir un comentario inteligente, coherente y estructurado sobre este post en el que expones parte de tu sentir pero....prefiero decir con mucho orgullo que soy DECIMIS!!!!!
ResponderBorrar...traigo
ResponderBorrarsangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
TE SIGO TU BLOG
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
AFECTUOSAMENTE
ASILO DE LA TRISTEZA
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE LOVE STORY, CABALLO, LA CONQUISTA DE AMERICA CRISOL.
José
ramón...
Buen post, me ha gustado...a pesar de ser asilo de la tristeza! un beso de color, que se convierte en un susurro que un humano podrá escuchar.
ResponderBorrarEscribes estupendo, con una calidad envidiable. Aplaudo tu talento. Un abrazo y Felicitaciones!
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