Este blog, que hoy llega a su fin, fue mi principal espacio en línea por muchos años. Siendo exactos, desde el 2006. Gracias a éste conocí a mucha gente con quienes viví muchas cosas. Y junto con la emoción particular de esas experiencias (unas buenas, otras malas) con esas muchas personas (igual: unas buenas, y otras malas), llegaron también importantes lecciones que perduran.
Le agradezco tanto a quienes sí se quedaron en mi vida hasta la actualidad, como también a quienes siguieron leyendo y comentando, manteniendo esto activo.
Estaré en otros lugares; en mi canal de YouTube, Facebook, Twitter, Twitch, e Instagram. Espero encontrarme a quienes estén también allá. De nuevo: gracias, y adiós.
(El mensaje en clave que componía el inicio del texto de este post originalmente cumplió el tiempo y propósito en que debía estar, y fue ya removido)