Recientemente se abrió el debate ya en otras veces discutido, sobre si deben legalizarse o no las drogas en el país. Esto, por supuesto, se debe a la escalada de violencia por parte de los cárteles de la droga que se ha estado viviendo en distintas regiones del país, algunos que en el pasado ni siquiera eran plazas disputadas por el crimen. Distintas ciudades ya con su historia de crímenes se han vuelto aún más violentas al convertirse en plazas disputadas por grupos delictivos, y en donde hay violencia por tales motivos a veces los consejos de prevención del delito no son suficientes para bajar el número de víctimas de forma significativa.
Quienes se oponen a la legalización argumentan que eso no acabará con la violencia, que las drogas más fuertes, las llamadas drogas duras, seguirán vendiéndose y por lo tanto los narcos seguirán peleando por el control de las rutas, o quizá se desviarían a delinquir con otras cosas, que ya ha caído mucha gente en enfrentamientos y ejecuciones, y ultimadamente, que creen que las cosas seguirán como están.
Yo no los voy a criticar por pensar así. De hecho, comprendo que tengan tales ideas. No los voy a llamar idiotas ni cerrados, como acostumbra hacer la gente que se radicaliza en un tema en vez de debatir y argumentar inteligentemente. Y en el espíritu de eso, déjenme ilustrarles el punto de quienes están a favor, permítanme detallar el argumento a favor.
Primeramente: la violencia. Nadie está asegurando que con legalizar las drogas se acabaría. Es la naturaleza del ser humano el hacerse daño. Lastimamos a otros de forma tanto consciente como inconsciente, y nos lastimamos a nosotros mismos muchas veces con la apatía hacia el cuidado de nuestro ser (sí, exactamente como lo hacen los adictos).
La violencia de la humanidad no empezó con las drogas, estuvo presente antes que ellas y seguiría estando aunque por alguna mágica razón dejara de haber droga en el mundo para siempre.
¿Por qué? Primeramente, porque venimos con un paquete instintivo como especie que busca la autoconservación. Una especie aprende a defenderse según lo permitan sus recursos, o perece a manos de su depredador. Y el instinto del ser humano lo lleva a joder a su prójimo para defenderse.
El otro factor es, por supuesto, el aprendizaje. Nos educan en base a la competitividad, a diferenciar niveles de condición social, nos sumergen en una realidad materialista donde vemos a través de un cristal a los que tienen más que uno y a veces sin merecerlo. Y a la par de eso, tenemos que reservar un espacio de nuestra mente a las ambiguedades religiosas con las que también a muchos nos llenan la cabeza cuando somos pequeños.
De ahí viene la violencia, señores. Del instinto, y de la educación. Es curioso cómo las autoridades de la SEP saltaron de inmediato a decir que no apoyan para nada el que se legalice la droga, argumentando que eso "dañaría a los niños".
Yo veo aun más dañino el que no se les imparta conocimiento útil desde los niveles básicos acerca de las drogas (y de paso sobre el importante tema de la sexualidad, también), y en vez de eso les impartan clases sobre temas que les serán irrelevantes en su vida futura.
Quien haya tenido un aprendizaje bien dosificado desde primaria, será un individuo capaz de emitir juicios objetivos, y de visualizar consecuencias y a su vez empatizar con otros. Aun sin esas reformas en la educación tan necesarias en México, existen ese tipo de personas, por fortuna. Gente que tiene las drogas o las prostitutas a la vuelta de la esquina y sabe que no las necesita, no tiene por qué perderse en eso. Medita riesgos, compara con las necesidades reales, y puede decir "No" aun ante la presión de amigos e incluso parientes.
Legalizar no significa que van a saturar cada esquina y escuela con droga, de la misma manera que hoy no ven cantinas instaladas dentro de de centros escolares. El producto se sometería a un control de calidad, producción, y por supuesto: de uso y distribución.
Jugar la carta de "¡Alguien piense por favor en los niños!" resulta poco convincente, si viene de la misma gente que le permite a los menores el comer chatarra sin control hasta ser obesos, mientras maestros y padres se pasan la papa caliente sobre quién debe inculcarles el sistema de valores que les permita decidir qué es bueno meter en su cuerpo y qué definitivamente no (y sí, puede aplicarse esa frase ampliamente: comida, sexo, y substancias).
Segundo: las drogas duras seguirán vendiéndose. ¡Por supuesto! Seguirán vendiéndose, y seguirá habiendo gran demanda, principalmente del lado de Estados Unidos. ¿Qué sentido tiene la legalización entonces? Tiene mucho $entido, $eñores.
¿Qué es lo que temen? ¿Que el país se vuelva "decadente"? Echen un vistazo a cómo está ahora. Como dirían los gringos: despierten y huelan el café. Tenemos puntos de venta, o también "frentes" disfrazados por todos lados, y todos operados por el crimen organizado en mayor o menor medida. Tenemos decapitaciones, evisceramientos, mutilaciones, cadáveres disueltos en químicos, etcétera. Y lo más grave: ahora hay atentados masivos (bloqueos, coches bomba) y víctimas inocentes que ya han caído, mujeres y menores de edad incluidos.
Me suena a que la decadencia ya está aquí, ¿no lo creen? Y, aunque sé que les costará trabajo creerlo, la venta de drogas controlada y supervisada por el gobierno traería un mayor orden, no el caos que les viene a la mente como primera imagen.
Muchos delitos comunes (asalto, robo a casa-habitación, robo de auto, etcétera) que realizan los delincuentes ya sea solos o en grupo son para poder conseguir la droga que tanto desean. Droga que, por su estatus ilegal y su venta clandestina, se vende a precios exorbitantes, muy por encima de su valor real. En la famosa época de la Prohibición en Estados Unidos, en la cual prosperaron varias mafias en los Estados Unidos, les sorprendería el precio al que se llegaba a vender una botella de whisky. Y miren cómo es ahora.
Respecto a los cárteles, puedo decirles algo: hasta los imperios más poderosos han caído. Lo que sucede con los cárteles es que son hábiles para moverse en países donde la ley es ambigua y se contradice/sabotea a sí misma. Dos claros ejemplos son Estados Unidos y su Segunda Enmienda (venta y portación de armas por civiles) y México con sus amparos. A través de las grietas que hay en la impartición de justicia es como logran acercarse lo suficiente a gente clave para corromperlos bajo soborno o amenaza.
Afianzando esto, pueden dedicarse, además del narcotráfico, al secuestro, robo, asalto, trata de personas y extorsión en sus distintas modalidades. Y esas actividades son las que hacen imposible la creencia de que de pronto se volverán empresarios moviéndose dentro del marco legal.
Ellos seguirían siendo buscados, para rendir cuentas por esos crímenes. ¿Quiénes los buscarán? Como hasta ahora: las fuerzas policiacas, Ejército y Marina. Y qué mejor si éstos son respaldados y equipados por su gobierno, usando los nuevos recursos que lleguen a sus manos. Una perspectiva soñadora, por supuesto, pero aún podemos imaginar que a un nuevo ingreso se le daría el uso adecuado, por lo menos a la mayor parte.Muchos han caído en el combate al crimen organizado, en efecto. Les recordamos y honramos. Y precisamente por la memoria de estos caídos es que debemos cambiar por completo la estrategia para enfrentar al enemigo, ya que la que se ha usado hasta el día de hoy es poco o nada exitosa.
Cuando vas a la guerra contra alguien, uno de los mejores movimientos que puedes hacer es el tomar sus propios suministros y usarlos para tu lado. Así, sin mermar tus propias reservas, te fortalecerás y podrás ir a la carga. A su vez, le habrás quitado de sus manos el control de un recurso que hasta hace poco consideraban como suyo.
Pues bien, señores: en las guerras del pasado, esos recursos eran el agua, la fuente de alimento, y los caminos estratégicos. Y en la guerra contra el narco de nuestros días, los recursos que hay que arrebatarles es el mismo producto que ofrecen: la droga. Dáñales en sus filas, y los refuerzos vendrán a reemplazarlos. Dáñales sus finanzas, y veremos si continúan teniendo la misma efectividad.
Atrévanse a ver fuera del cuadro y a considerar apoyar esta medida. Tenemos otras armas para hacer frente a la ola de violencia en México, pero se necesita de una mentalidad abierta para poder entenderlas y emplearlas.
La otra alternativa es el no hacer nada y esperar a ver si las cosas se solucionan por sí solas: que Estados Unidos se abstenga de fabricar armas en masa, las que luego dan tanto poderío a los criminales; o que al fin los cárteles se detengan y hagan la paz, sin medias tintas ni traiciones. Dejo a su propio juicio si estas dos cosas que acabo de mencionar son factibles o no.
Yo de momento, estoy en contra de la legalización de drogas, ya que considero que primero hay que mejorar muchos otros rubros antes de ese... se ve cabrón muy cabrón... per tal ves en un futuro no muy lejano, se puedas hacer cambios DE FONDO en la política y la sociedad para poder permitir legalizar las drogas, sin que éstas se conviertan en una amenaza mñas que en una oportunidad...
ResponderBorraryo lo apoyo pero con reserva. se necesita primero la depuracion y el control de armas antes que aventarse a la 'legalizada'
ResponderBorrartal vez tambien estaria de alternativa el hacer penas mas severas en la ley. bueno que los expertos digan si si o no
Esa seria una medida definitiva. Legalizar las drogas no significaria que todos los crios se lanzaran en manada a comprarlas como si se tratara de caramelos. Yo no fumo, y el tabaco es legal y he tenido acceso a el desde niño si lo hubiera querido.
ResponderBorrarSi no, se puede mirar el caso de Amsterdam. ¿Acaso es un lugar decadente?
Un punto importante al que has aludido es la educacion. Formar a gente con sentido comun y capaz de razonar haria una gran diferencia.
Por otro lado, es bueno que se abra el debate sobre la legalizacion. El problema es que los politicos suelen cagarla a la hora de tomar decisiones, y si lo propusieran a votacion casi seria peor, porque la mayoria de la poblacion es estupida.
Personalmente te apoyo en cuanto a la legalización, pero Destroyer tiene mucha razón también, no tenemos la madurez como país para vivir con una carga así, según se el sistema de los Países Bajos sería como el modelo a seguir, pero la verdad es que ellos son mucho más civilizados, aún así te apoyo
ResponderBorrarLas drogas ya están parcialmente legalizadas desde hace tiempo, al menos en el codigo penal para el distrito federal un ciudadano que se declare adicto tiene derecho a portar para su consumo personal hasta 30 gramos de martihuana o un gramo de cocaína.
ResponderBorrarEl enemigo a vencer son los prejuicios sociales, porque la ley permite que un adicto tenga sus dosis, pero la sociedad juzga y condena al mismo adicto marcandolo, segregandolo, discriminandolo y vetandolo laboralmente.
¿opciones? obvio, la clandestinidad. las drogas deben ser legalizadas, pero ello también debe implicar garantías de derechos humanos para quienes las consuman responsablemente.
Yo conozco hombres y mujeres que se echan un churro o unos pericazos, y son personas productivas, responsables, respetuosas y honestas; sin embargo también conozco gente que no bebe, ni fuma , ni se droga de ninguna manera y hasta son religiosos, pero son mediocres, ladinos, oportunistas, vivales, huevones, cobardes, traidores, intrigosos, infieles, tiránicos o perversos. es en serio, abundan.
La ideosincracia de la sociedad debe cambiar o ser forzada a cambiar si se pretende legalizar las drogas.
Buen post, como siempre en bien general de la humanidad.:
Yo tambien apoyo esa idea con reserva. Mi reserva, principalmente es por las razones que aqui han mencionado, en teoria, suena bien, pero desafortunadamente, no tenemos esa "madurez" como sociedad para algo así.
ResponderBorrarSin embargo, ya que el gobierno de oportunidad de un debate sobre el tema, me parece un buen comienzo.
Saludos, alex !
En lo particular creo que la legalización sería la manera más realista de combatir el narcotráfico. Pero como bien dicen todos los que han comentado esta entrada antes que yo, lo primero seria cambiar esa mentalidad pendeja que el mexicano promedio tiene con respecto a este tema.
ResponderBorrarDigo, el hecho de que las legalizan no significa que las vayan a vender como verduras en el supermercado o como cigarros en las tiendas de abarrotes. Hay que ser realmente tarado para creer algo así. Digo ¿a poco puedo poner mi changarro de lámina y ponerme a vender alcohol así como así? Pues no. Mis padres tenian una tienda de abarrotes y por eso se que para vender alcohol necesitas tener un permiso. Con las drogas, en caso de que se legalicen, sería igual, ¿quieres vender tu cannabis?, pues ve y saca tu licencia y renuevala cada x tiempo. La idea es burocratizar.
Igual, el drogadicto debe dejar de ser tratado como un paria, y se debe de educar a los chamacos desde chicos sobre que pedo con las drogas, y con el sexo, vaya. No que en las primarias y secundarias vemos que se les dan mamadas de liderazgo, inteligencia emocional, autoestima y un sin fin de pendejadas que no sirven para otra cosa más que para que sus padres se desentiendan de enseñarles valores de verdad ellos mismos, y dicho sea de paso, para justificar la idiosincracia mediocre del mexicano promedio.
Buena entrada mi estimado. Saludos
Ah, y El Chipotle Enmascarado tiene razón con esos tipos de personas. Yo conozco muchas de ambos tipos y puedo decir que muchos de mis mejores amigos son del primer tipo.
ResponderBorrarEs más, en mi universidad abundan como los hongos en epocas de lluvias las personas del segundo tipo, y vaya que le cagan el palo a su servidor.
...primero que eduquen al país... y luego que legalicen lo que quieran...
ResponderBorrar...se acabaría con un negocio ilegal, pero se dará inicio con otro legal, para mi no tiene sentido...
...además el problema no es tanto el consumo nacional... aqui la gente no compra las drogas con dólares, el verdadero negocio está en nuestro vecino país... que ellos legalicen las drogas y verán que poco a poco se va a acabando el negocio en paises como el nuestro...
...además creo que el problema del narcotráfico tiene bases sociales muy fuertes... es decir, a mucha gente no le queda alternativa, no hay trabajo en el país, eso aunado a la ignorancia... bummm... ahi tienen el narcotráfico...
yo si voto a favor de la legalización. aunque dirán que es muy soñador esperar que sirva también es soñador esperar que el pinche desmadre se arregle con lo que están haciendo
ResponderBorrar"...El producto se sometería a un control de calidad, producción, y por supuesto: de uso y distribución..."
ResponderBorrarPor favor, lo que menos tenemos los mexicanos es la responsabilidad que se requiere cómo para lograr propuestas cómo la anterior.
A cada normativa establecida por el estado siempre habrá quienes las quiera romper, las muchas de las veces por el simple hecho de ser rebelde.
Ilusos.
Yo estoy en contra de la legalizacion de las Drogas, realmente no es la solucion mas optima, eso no elimina ni carteles, ni violencia o que le lleguen a los menores de edad.
ResponderBorrarLa educacion y el Trabajo es lo que deberia de mantenerse al margen, realmente este conflicto hundio todo y ataco a sectores que no debian ser tocados.
Uno no caga donde come y no rompe los pilares que sostienen sus edificios
Legalizarlas? chin con eso ya no tendrìa que ir a tepito a comprar y me perderìa de la adrenalina adicional de conseguir algo prohibido.
ResponderBorrarYo pienso Sr. Alexander, que la solución a este problema, como a muchos otros, radica en la educación. En la educación que se imparte a nuestros niños, como usted lo menciona, si la educación fuera la correcta y optima en temas como drogadiccion y sexualidad, es seguro que el panorama seria diferente independientemente de si la droga es legal o ilegal.
ResponderBorrarLo que pasa es que en este país, ni padres ni escuelas, quieren tomar la verdadera responsabilidad de educar y preparar a nuestros niños, para el mundo real.
Y si, quizás, la legalización seria una opción mas viable que la guerra que inicio el Sr. presidente, sin embargo, coincido en que tampoco es una solución inmediata y que primeramente se debería trabajar en la educación de estos temas, para preparar una sociedad que este lista para poder lidiar con drogas todos los días y aun así cumplir con un papel provechoso y digno dentro de la misma...
Insisto el secreto es la educación...
Es un punto de vista personal, que espero no moleste a nadie.
Como siempre excelentes post, y aborda temas controversiales con gran inteligencia.
Sincera admiración Sr. Alexander.
Saludos!!
A pesar de la fuerte evidencia que constituyen los datos que respaldan los programas efectivos sobre prevención del abuso de drogas y el tratamiento de los síntomas del abuso, algunos personajes de la política apoyan la legalización de drogas ilícitas.
ResponderBorrarLee P. Brown, exdirector de la Oficina Nacional para la Política del Control de Drogas en Estados Unidos opina que la legalización “es una fórmula para la auto-destrucción”…
Wayne Roques, vocero de la Agencia para la aplicación de la Política Antidrogas, dice: “Las políticas que legalizan drogas perjudican a las ciudades y lesionan gravemente las poblaciones suburbanas… la legalización de drogas constituye un concepto decadente, desde el punto de vista moral e intelectual”.
La mayoría de las personas quieren saber la verdad acerca de las drogas y esperan que las políticas públicas sobre éste tema se fundamenten en hechos y no en mitos o suposiciones. Pero, sorprendentemente, la política de legalización de drogas está llena de mitos