"Meter las manos al fuego". La mayoría conocemos esa expresión. Se usa para referirse a la situación en que crees tanto en alguien o tanto deseas ayudarle, que estás dispuesto a ponerte a ti mismo en una situación de exposición o hasta riesgo. Suele ser por alguien que ya conocemos y en quien confiamos, aunque en raras ocasiones llega a ser por alguien desconocido. Muchos creen que solo aplica a casos donde se trata de una discusión verbal donde queda en duda la capacidad, inocencia, o valores de a quien acusan, pero en realidad suele ser más que eso.
Hay dos frases que se manejan en Estados Unidos aplicables a lo que voy a contar. Una de ellas es: You play with matches, you get burned (si juegas con cerillos, te quemas), y la otra No good deed goes unpunished (Ninguna buena acción queda impune). Conozco anécdotas de gente que son prueba de ésto, y a mí mismo me tocó vivirlo algunas veces.
Estas dos situaciones que voy a contar son similares. La primera fue una vez que en una parada de camión ya en la noche encontré a una chica muy guapa que estaba llorando a lágrima viva y con el rostro enrojecido. Como se veía así y aparte estaba respirando rápido, lo primero que se me ocurrió fue que tal vez la habían asaltado, así que me acerqué y hablé con ella. Le pregunté qué le había pasado y si necesitaba ayuda, y me miró con desconfianza y como dudando en hablarme. Hasta quise ser comprensivo, pensé que de seguro estaba acostumbrada a que el montón de tipos cachondos revoloteara a su alrededor como buitres. Le dije incluso como aclaración "no te estoy queriendo molestar, te pregunto bien, no sé si te robaron o te pasó algo".
Aclarándole así que no estaba por intentar seducirla ni hacerle nada, me platicó que su novio acababa de golpearla y se había ido, dejándola ahí. Agregó que estaba segura de que en cualquier momento regresaría. Le dije que podíamos ir a la tienda que estaba ahí a unos cuantos pasos, llamar a la policía, y esperar ahí a que llegaran (aprovechando que en la tienda hay cámaras, y eso). Ya no recuerdo qué tanto más se dijo en la conversación tal cual, pero les diré un resumen de lo sucedido: le propuse más de una vez llamar a la policía y me dijo que No, y hasta me levantó la voz como si estuviera queriendo espantar a un pretendiente o a alguien fastidiándola, que mejor me fuera porque su novio era muy celoso y muy agresivo y que no le gustaba que hubiera hombres hablándole.
Sin decir nada ni tener mayor reacción, le dije: "Ok, suerte". Y me fui. Pero no les negaré, que al irme sí pensé "que se vaya al carajo, entonces". Por eso es que todas las personitas de ideologías radicales de hoy y esos justicieros del teclado que critican a quienes no se meten a defender a gente en la calle no tienen una jodida idea de lo que están hablando. Muchos hay que lo han intentado hacer y terminan mal, luego de haber querido ayudar de buena fe. Siempre es igual: los que menos saben son los más metiches y más habladores. Y tuve suerte que fuera solo eso; hay otros que por meterse a ayudar terminan heridos, o los acusan de algo que no hicieron, y la supuesta víctima no solo no agradece sino que hasta miente para embaucar al tonto bien intencionado que creyó estar haciendo lo correcto.
La segunda ocasión fue, como dije antes, algo similar. En el Barrio Antiguo (para quienes no son de mi natal Monterrey: es el barrio céntrico donde se ubican muchos antros, bares, lugares para bailar, etc) me encontré a una chica asustada, y estaba reclinada en una pared, como escondiéndose y mirando para todos lados. Al igual que en el caso anterior, le pregunté qué pasaba, y me dijo que su exnovio estaba buscándola y que le dijo que la iba a golpear y se la iba a llevar a la fuerza. También igual que el caso anterior, le sugiero lo de la policía y bla bla, y lo mismo: no, y más no. Y miren, yo entiendo eso de "es que están muy asustadas de las represalias, es que de todos modos cuando salga va a hacerle algo", y otros argumentos ya conocidos. Pero aún con eso, si no denuncias, ¿cómo esperas protegerte tantito? Estoy de acuerdo en que tarde o temprano resulta mejor armarte en tu casa y hasta traer algo contigo cuando andas en la calle y pedir a familiares la ayuda que las autoridades por negligencia no te dan, pero en un inicio es importante hacer la denuncia del delito que sea, sobre todo cuando es una amenaza inminente. Para que quede asentado de antemano que seguiste los pasos. Si no lo haces, más recursos para defenderse le estás dando a tu agresor.
Volviendo a esta segunda chica, ella no se portó mal. Dijo que quería llamar a sus tíos para que fueran por ella pero no quería que el presunto exnovio acosador la encontrara. Pensando en eso pero también por supuesto en mi seguridad (algunos asaltantes usan esa modalidad de dama en peligro para atraerte a otro lado con menos gente para robarte y hasta lastimarte), le dije "solo hay que salir de la zona donde están los antros más concurridos, vamos a Tal Calle (la cual no tiene antros pero sí tiendas y puestos de comida con gente, y por lo tanto testigos) y si quieres te acompaño hasta que lleguen por ti. Así lo hicimos, y ya cuando me dijo que ya veía venir al fondo de la cuadra el auto de su tío, me despedí y rápido me fui de ahí.
Siempre le he dicho a quienes quieran escucharme que existe una forma inteligente de ayudar a los demás. Y esa forma es cuidarte las espaldas antes que nada y asegurar que no sea un peligro para ti o algo en donde terminen embaucándote de alguna forma. Teniendo eso en mente, puedes ayudar a quien quieras, y es algo que yo mismo procuro hacer con gusto cuando me encuentro a alguien que lo necesita. Se trata de usar la cabeza, vaya. Y no es tan difícil, solo que en estos tiempos hay quienes se preocupan por el "qué dirán" o el "tal vez estén grabando esto y no quiero quedar mal", los cuales se unen a las filas de los que quieren quedar bien porque creen que eso les da puntos extra con Dios o vayan ustedes a saber con quién, y se lanzan a la carga tontamente como Don Quijote contra los molinos, para después acabar en el hospital o en la cárcel luego de jugar al héroe, sin recibir ni un "gracias".
¿Ves a alguien enmedio de una agresión? Llama a la policía tú mismo, no juegues al héroe metiéndote al pleito sin saber si alguien trae un arma y va a decidir usarla. ¿Un accidente en plena carretera? No te detengas ni te bajes de tu carro, no sabes si pudiera ser un truco para asaltarte. Solo fíjate en la señal de qué kilómetro es y avisas más adelante a las autoridades, pero sin detenerte. Y así con cada cosa. Como dije: hay una forma inteligente de ayudar, y hay que asegurarse de hacerlo así. No meter las manos al fuego así como así, como decía en un inicio. Porque si bien puede haber gente que lo vale, la mayoría la verdad no. Y no vas a jugártela con un desconocido queriendo creer que es alguien decente y que va a responder de buena manera. Y si aún con lo que he relatado no me creen, busquen el tema en internet y se encontrarán con cada historia que les hará recordar lo que ya dije: ante cualquier situación y antes que nada, protéjanse a si mismos. Porque nadie más lo hará por ustedes.